sábado, 23 de agosto de 2014

AFORISMOS Y NIMIEDADES PARA SORDOS II


A la crema de la intelectualidad

DIECISÉIS: Estuvo sembrado el Galileo: “Por sus frutos los conoceréis”. 
DIECISIETE: Normalmente nos salvamos por un pelo.
DIECIOCHO: En la vida todo el mundo consigue lo que quiere. Lo malo es que sólo se sabe lo que se quiere al obtenerlo.
DIECINUEVE: Es imprescindible comprar el lote entero.
VEINTE: Las llaves se encuentran siempre en el fondo del océano. 
VEINTIUNO: ¡Tornadizas nubes, que jamás se están quietas! 
VEINTIDÓS: Se han hecho experimentos: El silencio absoluto enloquece.
VEINTITRÉS: Cela, en su discurso del Cervantes: “Nunca se llega tarde a ningún sitio”.
VEINTICUATRO: El Arte y el buen gusto están reñidos.
VEINTICINCO: De una canción de hace años: ¡Ruido, ruido, ruido, ruido, ruido...!
VEINTISÉIS: Exabrupto: ¡Se les tendría que caer la cara de vergüenza! 
VEINTISIETE: También se ha dicho: Para un escritor, los únicos derechos que existen son los derechos de autor.
VEINTIOCHO: El tonto del pueblo no tiene monumento.
VEINTINUEVE: Cuenta el escritor Erskine Caldwell que, durante un invierno, las ratas abandonaron su casa por el frío para refugiarse en la cálida y acogedora del vecino. Éste le retiró el saludo.
TREINTA: “La conjura de los necios”: El mejor título que se le puede ocurrir a un escritor.




3 comentarios:

  1. Muy cierto: " Estuvo sembrado el Galileo: “Por sus frutos los conoceréis”.

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  2. Ni aun obteniéndolo se sabe lo que uno quiere, porque cuando se consigue se pierde el interés

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  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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